¡Ay! cómo duele crecer
Las personas no valoran lo que tienen hasta que lo pierden. Así reza un dicho popular, seguramente creado por una persona de gran sentido común y repetido hasta el cansancio sobre todo en situaciones embarazosas donde el silencio sería un mejor aliado.
Yo acabo de descubrir que es cierto y daré fe de mi caso, hermano, para que crean y vean la luz. Yo tenía mis cuatro muelas del juicio, dos de ellas habían asomado tiernamente por ahí por enero, provocándome más de un dolor. Y por ese simple hecho decidí sacármelas, arrancármelas, exiliarlas de mi boca que era su hogar.
El viernes me extrajeron las dos muelas del juicio de abajo. ¡Qué decisión más mala, por la cresta! En serio se los digo hermanos: uno no valora lo que tiene hasta que lo pierde... ¡¡¡pucha que extraño mis muelas!!!
El sábado y el domingo parecía osito Gummi con mis cachetes inflados. Eso sin contar que me dolía, que tenía que comer puras cosas hechas papilla o líquidas y que hablaba peor que Guru Guru.
Las cosas han ido mejorando poco a poco (demasiado "poco a poco" según yo) y todavía sueño con zamparme un bistec a lo pobre grosero (que juro que lo haré apenas pueda mascar bien).
Lo bueno del asunto es que fue la ocasión perfecta para volver a un antiguo amor sin ninguna culpa: el Cerelac. Hay gente que sé que me va a entender: esa cuestión, el pilar nutricional de mi infancia, era altamente adictivo... yo me lo comía hasta seco =P
Lo malo del asunto: todo el resto. Qué mierda de vida justo después que te las sacan!
En fin... pronto estaremos con más noticias freak y reclamos dignos de la Tía Tute en este blog del demonio, mis queridos.
Un beso (no en la mejilla, que duele un poquito aún).
8 comentarios:
Para la desesperación de mi santa madre (dentista) nací sin los molares del juicio. Y sin premolares.
De hecho, las radiografías de mi boca han dado la vuelta al mundo en manos de un radiólogo que me atiende gratis una vez al año para controlar lo freak de mi dentadura.
El dato odontológico del día.
Un placer tenerla de visita en el blog, pues ;)
Jajaja, y yo que te iba a invitar a una parrillada xD
Lo mejor que pude hacer fue sacarme las cuatro muelas del juicio al mismo tiempo, el mismo día con un odontologo de la calle a punta de mazo y cincel.
Cuanto placer senti...guiño guiño..
Los siento me volvi adicto a la gelatina y ya no tengo cura.
Te entiendo.
q feo!!!! pobre de tiiiiiiiiiiiiiiiiiii
yo soy una variacion genetica extraña no me salieron unas muelas, ni las normales me salieron menos las del juicio jo jo j
Qué es el cerelac?
Mónica: qué suerte la tuya, no sabes como te envidio, en serio =P
Boo: igual acepto invitaciones a plazo =P
Calo: es rica la jalea, pero después de como 6 días caaansaaa... quiero mi bisteeec XD
Mona: otra más! qué envidia!
Nicolás: una papilla para los bebés que yo comí hasta bien grandota... incluso seca... jijiji =P
Saludos... ya estoy mejor, pero ayer no me pudieron sacar los puntos, debido a que tengo una agradable contractura muscular, así que se supone que me los sacan el lunes... en fin... c'est la vie =P
Ufff, a mi me salieron, pero no me molestan, dejémoslo como era antes en la naturaleza.
Obliterator: yo las habría dejado donde estaban, pero el problema fue que me comenzaron a joder. La buena noticia es que tal vez no sea necesario sacarme las de arriba =)
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